Muchos propietarios descubren horrorizados tras ver sus viviendas arruinadas, el hecho de que sus pólizas del seguro no cubren todos los costos para los que creían estar asegurados y que son los necesarios y justos para poder reconstruir sus viviendas. Probablemente tampoco vean cubiertos todos los gastos adicionales necesarios para el realojamiento temporal y el mantenimiento. Ven con desesperación como a pesar de tener un seguro que creían les salvaba ante cualquier catástrofe, esto no es así y tienen que desembolsar grandes cantidades de dinero de sus propios bolsillos.
Por ello es absolutamente necesario que busques tu póliza, la leas de arriba abajo con detenimiento, te fijes en todos los detalles y anotes lo que no comprendas, para que, en caso necesario si te sorprende una tragedia, estés bien seguro y entiendas todas las coberturas a que tienes derecho. Allá donde tengas una duda, apúntala en un papel y luego consulta al representante de tu aseguradora.
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